El autoconsumo se está realizando en los horarios en los que existe una mayor demanda y las tarifas eléctricas son más caras (P2 en invierno y P1+P2 en verano) por lo que la repercusión en la factura es notablemente mayor que en la energía consumida.
Para este caso concreto, el 38% de energía producida equivale a un 50% de la facturación en concepto de energía consumida.